El Barcelona logró una cómoda conquista sobre el Rayo Vallecano (0-7), gracias a los dobletes de Pedro y Messi, y los tantos de Keita, Thiago y Rober en propia puerta, que le permiten olvidar sus dos últimos tropiezos en Europa y en Agrupación, y posponen una día el alirón por el título del Verdadero Madrid.
Bajo un ámbito festivo revestido con una gran entrada de sabido, el Barcelona se presentó en Vallecas dispuesto a olvidar sus penas por la flamante asesinato europea y la más que probable pérdida de la Faja a manos del Verdadero Madrid. El Barcelona, con varias novedades en su once inicial y con Dani Alves, Cesc Fabregas y Andrés Iniesta en el banquillo, desplegó desde el inicio su característico fútbol de toque combinativo bajo la bastoncillo de Thiago Alcántara.
En una jugada de esas nació el primer tanto del partido, que llegó a los 18 minutos luego de que Pedro Rodríguez recibiera un balón en la frontal del Campo de acción derecha y su centro raso lo rematara en boca de acierto el argentino Leo Messi. Al Rayo se le vio muy motivado por la visitante del Barcelona y saltó al césped con un planteamiento muy ofensivo gracias a la presencia de Diego Costa y Raúl Tamudo como referencias en la delantera. Los dos se sintieron muy desasistidos durante gran parte del partido, en parte por el buen hacer de Carles Puyol, que desde el centro de la trasera capitaneó a la defensa blaugrana.
El dominio del Barca se plasmó en el segundo acierto del colisión con una faena que se inició gracias a una recuperación de Messi, un pase en profundidad de Seydou Keita y el acierto del chileno Alexis Sánchez, quien burló la salida del guardameta David Cobeño y cruzó un balón que sobre la confín de acierto introdujo en su meta Rober.
El conjunto madrileño lo intentó con sus armas, pero la única ocasión con peligro que se contabilizó durante los primeros cuarenta y cinco minutos fue un emanación de yerro de Roberto Trashorras que despejó a córner José Manuel Pinto con una buena estirada.
A Messi le costó entrar en el partido, pero cuando lo hizo fue para imaginar una barrabasada individual que terminó en un pase a Seydou Keita y que éste culminó con tranquilidad con un disparo por bajo delante el que nulo pudo hacer Cobeño.
Carencia más comenzar la segunda parte el Barcelona amplió aún más su diferencia con un tanto de Pedro, que solo tuvo que empujar el balón en el Radio pequeña a posteriori de un rechazo en el madero tras un disparo de Alexis.
Esa diferencia fue ficticio de remontar para el Rayo, pese a los intentos de su técnico, José Ramón Sandoval, de aventajar algo más de posesión en la medular con la entrada de los canteranos Diego Benito y Diamanka. El guineano Lass Bangoura fue el único que pudo marcar para los locales con un disparo ajustado que despejó Pinto.
El conjunto azulgrana se mostró eléctrico en su entretenimiento por la facción izquierda, dónde Pedro no encontró competición en todo el aproximación, y por el costado derecho, sobre todo con la entrada del brasileño Dani Alves, que se mostró desequilibrante y dio la auxilio del quinto gol, obra de Thiago de inicio.
El Barcelona redondeó la goleada con un tanto de Pedro, que recogió un balón interiormente del ámbito y con la zurda lanzó un disparo que Cobeño no pudo atrapar, y con otro de Messi, que remató a placer un centro desde la izquierda.
