Sin cirugías ni botox, y sin la "ayuda" del photoshop, la joven es matemáticamente perfecta. El jurado del concurso de belleza eligió su rostro entre otros 8 mil como el más bello de Reino Unido. Las participantes debían presentarse sin maquillaje y quedaban fuera las que estuvieran operadas. Más allá de que su melena rubia, labios carnosos y ojos azules entran en el interior de los cánones de belleza actuales, lo que más llamó la atención es que su cara es matemáticamente perfecta: es simétrica y de dimensiones ideales, y la distancia entre sus ojos, boca, frente y barbilla es la óptima, publicó el sitio ABC.es.
Florence quedó entre las tres finalistas del jurado, y fueron los votos de los espectadoras los que la llevaron al primer puesto. Actualmente vive en Dover, al sureste de Inglaterra, y mientras se prepara para los exámenes de acceso a la universidad trabaja en un puesto de pescado y papas fritas